¿Fumar comida? ¿Porros con qué? Sí, leíste bien. En nuestra serie de vídeos llamada ÑAM, combinamos dos de nuestros placeres favoritos: el cannabis y la comida. A lo largo de esta serie, hemos experimentado con diferentes comidas, transformándolos en ingeniosos experimentos para fumar. ¡Así ha sido nuestra experiencia hasta ahora!

1. Buñuelo

En plena época decembrina en Colombia, queríamos hacer algo especial para dar inicio a nuestra serie ÑAM. Y, ¿qué mejor manera de hacerlo que con un buñuelo, uno de los alimentos más representativos en las celebraciones de fin de año de nuestra cultura?

Decidimos transformar un buñuelo en un elemento para fumar nuestras flores. Para ello, lo primero que hicimos, fue un pequeño orificio en el buñuelo y lo adaptamos para que funcionara como una especie de túnel. Después, colocamos al otro extremo un joint armado, antes de prenderlo, verificamos que hubiera suficiente flujo de aire para una buena calada.

El resultado fue increíble. El buñuelo no solo cumplió su función como satélite, sino que el sabor de las flores se mezcló de manera increíble con el del buñuelo. La masa esponjosa y ligeramente dulce complementa perfectamente el sabor, creando una experiencia deliciosa. Fue una gran inicio para nuestra serie ÑAM, con un toque festivo y una mezcla de sabores que nunca habíamos probado.

Este primer experimento nos dejó emocionados y ansiosos por ver qué otros alimentos podrían convertirse en medios para fumar las flores. El buñuelo se convirtió en una de nuestras experiencias favoritas y nos motivó a seguir explorando nuevas combinaciones.

2. Helado en platillo

Después del éxito con el buñuelo, decidimos continuar con nuestra serie ÑAM, subiéndole un poquito el nivel con un helado en platillo. Sabíamos que este experimento sería un verdadero desafío, ya que el helado, por naturaleza va a derretirse rápidamente.

Buscamos un helado que tuviese una textura un poco más consistente de lo normal, en este caso con el helado envuelto en dos galletas, había más firmeza para realizar los orificios por donde iba a pasar el aire para lograr nuestra calada.

La parte más complicada fue sincronizar todo para que el helado no se derritiera antes de poder disfrutar de una calada decente. Nos movimos rápido, aunque en realidad este día en específico, el sol que estaba entrando era sofocante ¡Fue todo un reto lograr hacer todo en un tiempo prudente para que el helado no se derritiera y pudiéramos lograr tener aunque sea una calada!

Finalmente, el ÑAM con helado en platillo salió todo un éxito. La mezcla del helado frío con el calor del porro creó una experiencia sensorial única. El contraste de temperaturas, junto con el sabor cremoso del helado y las flores, resultó en una combinación deliciosa y refrescante. Aunque fue un reto, valió la pena cada segundo del proceso.

3. Pizza

Decidimos poner a prueba nuestra creatividad con un alimento que todos aman. LA PIZZA. Sabíamos que combinar cannabis con esta gran comida podría ser una experiencia increíble.

Buscamos una pizza con ingredientes clásicos, un borde dorado y crujiente. El reto de este ÑAM estaba en lograr una calada en un espacio tan delgado. Hicimos un orificio en el borde de la pizza con mucho cuidado, para luego unirlo con un hueco central en donde se pondría la hierba triturada. Nos aseguramos de que hubiese paso de aire y listo, ¡a darle fuego! 

El proceso fue muy sencillo, con dedicación se logró hacer los huecos y al dar la primera calada, salieron una mezcla de aromas y sabores deliciosos. El sabor salado de la pizza con el terpeno de las flores fue una gran combinación; sin duda este ÑAM pasó completamente la prueba.

De todos los ÑAM hechos, este fue uno de los más llamativos para todos. A primera vista, la pizza luce espectacular y con las flores el sabor quedó increíble.

4. Dona

Nos arriesgamos con uno desafío bien dulce: una dona. Las donas son conocidas por su textura suave, su delicioso glaseado y su masa esponjosa. Decidimos llevar nuestro ÑAM a otro nivel al intentar usar una dona como dispositivo para fumar cannabis.

El primer paso fue seleccionar una dona clásica, en este caso escogimos una con chocolate. Sabíamos que la textura y el espesor de la masa iban a complicar un poco el asunto, pero estábamos emocionados por probarlo. Hicimos un agujero en el centro de la dona para colocar el porro y asegurarnos de que hubiera suficiente flujo de aire para una buena calada.

El primer intento no salió como esperábamos. La dona por su textura interna, no carburo, aun asi. Cambiamos la estrategia y utilizamos solo la flor triturada. Colocamos la flor en el agujero de la dona y la usamos como una pipa improvisada.

La mezcla de sabores fue… interesante: el glaseado y la masa esponjosa se combinaron con el sabor terroso de la flor, creando una experiencia diferente. Aunque la textura de la dona no era la más ideal para fumar, logramos que el ÑAM funcionara y nos dio una calada decente.

La experiencia con la dona fue un verdadero aprendizaje. Nos mostró que incluso los alimentos más inesperados pueden servir para experimentar y probar en muchas cosas, poniendo a prueba la creatividad. Aunque no fue el más delicioso de nuestros experimentos, fue divertido y se sumo a nuestra serie ÑAM.

5. Empanada

Llevamos nuestro ÑAM a otro nivel con una deliciosa empanada. Las empanadas, con su masa crujiente y su relleno, son un favorito en Colombia y sabíamos que sería una excelente adición a nuestra serie.

Elegimos una empanada clásica de carne. Hicimos un agujero en cada uno de los extremos de la empanada, de modo tal que uno fuese la boquilla y el otro el espacio para tacar. Al igual que con nuestros experimentos anteriores, la clave era asegurar que hubiera suficiente flujo de aire para las flores carburaran correctamente.

Sorprendentemente, la empanada funcionó perfecto en el ÑAM. La masa crujiente permitió una buena circulación del aire y el porro se encendió sin problemas. Haciendo una mezcla de sabores entre el salado y las flores, creando una experiencia única y deliciosa.

La carburación fue perfecta y la empanada se mantuvo intacta durante todo el proceso. Este ÑAM fue uno de los más exitosos y sabrosos hasta la fecha.

6. Pan de Bono

Nos embarcamos en una nuevo ÑAM, esta vez con un alimento delicioso, un pan de bono, para quienes no lo conocen, es un panecillo de queso que es un favorito en Colombia. El pan de bono, con su textura suave y esponjosa, y su sabor intensamente a queso.

Para comenzar, nos aseguramos de conseguir un pande bono fresco. Luego, hicimos un pequeño agujero en el extremo del pan para insertar las flores trituradas. Este paso fue crucial, ya que queríamos asegurarnos de que tuviera suficiente espacio para carburar correctamente.

El resultado fue sorprendente y espectacular. Desde la primera calada, la combinación del queso fundido y el cannabis creó una combinacion de sabores en deliciosa. 

La carburación fue perfecta, con un flujo de aire constante y suave. A medida que fumábamos, el calor del porro hizo que el queso dentro del pan de bono se derritiera ligeramente, intensificando aún más el sabor.

Este ÑAM con pan de bono estuvo increible y hasta el momento de todos los que hemos hecho y probado, este es nuestro favorito. No solo por la combinación de sabores, sino también por la simplicidad y efectividad del pan de bono como pipa. Fue una experiencia que sin duda repetiremos y que recomendamos a todos los quienes quieran probarlo

7. Frunas

Cerramos el primer trimestre con un ÑAM dulce. En esta ocasión, utilizamos frunas, un dulce bastante común en Colombia. Se destacan por su pronunciado sabor artificial a frutas y su textura masticable, por lo que nos pareció genial usarlo para un ÑAM.

A este ÑAM lo nombramos Pipafruna, ya que seleccionamos varios pedazos de distintos sabores y los apilamos formando una torre compacta, a través de esta torre hicimos un hueco para que pasara el aire, por encima pusimos otra fruna asemejando el bowl de la pipa, allí hicimos otro orificio que se unifica con el conducto de aire principal.

Una vez logramos que estuviese lista y verificamos el paso de aire, pusimos nuestras flores y ¡fuego! Desde el primer momento, fue una experiencia distinta, con su textura caramelizada y el sabor frutal, mezclado con los terpenos de las flores.

En temas de carburación, funcionó bastante bien. Con cada calada se derretía un poco el caramelo interno, dejando un sabor muy agradable en la boca.

Con nuestra serie ÑAM seguimos explorando nuevas formas de disfrutar de la comida y el cannabis. Cada experimento nos ha enseñado algo nuevo y ha sido delicioso. Desde buñuelos hasta Frunas, cada episodio ha traído su propio desafío y resultado (unos agradables, otros no tanto 🙁 ), mostrando la creatividad y dedicación que ponemos para que cada uno de ellos salga bien.

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